martes, 28 de junio de 2011

La inspiración de Prístinas en Tormento

Prístinas en Tormento es un proyecto multidisciplinar que tiene su origen en la necesidad de experimentar con diversas áreas artísticas y compartir nuevas metodologías de creación, con el objetivo de plasmar una obra de carácter híbrido, acercándonos al cortometraje dentro del formato audiovisual pero integrando técnicas de la danza, el teatro y el lenguaje cinematográfico.
Esta obra audiovisual aborda una de las más graves y ocultas anomalías de nuestra sociedad: el secuestro y abuso sexual que diariamente toma la vida de niñas y mujeres, ahondando de manera metafórica en los traumas sicológicos y físicos de las víctimas, situando la historia en un escenario de fantasía donde la realidad se confunde con la ficción.



   
Para el desarrollo estético de la obra se tomó como referente el cuento infantil por las posibilidades estéticas que contiene; el surrealismo y la poesía enclavados en contextos cotidianos como manera de representar el padecimiento de las protagonistas. Al igual que en el cuento, se construye un lenguaje en el que "la maldad" se disfraza de lo "bello", y a su vez esto último se codifica a partir de símbolos que profundizan en lo sórdido y oscuro de la historia.
 
La idea fue insinuar una segunda lectura a los hechos que acontecen en la historia, profundizando en la hermosura de los diferentes estados emocionales.

La propuesta artística apunta a un conflicto central que ocurre dentro de un espacio extremadamente limitado; situándonos en una real sensación de angustia, no libertad, represión y dominio. La obra pone en escena las eventualidades y peligros que provoca el choque de los cuerpos con el lugar habitado; y cómo se intenta sobrellevar este conflicto a través de diferentes dinámicas cotidianas y espacios mentales.


Este lugar construido es una casa-encierro donde habitan los personajes, un espacio reducido a una escala menor que el cuerpo humano, ambientado con los elementos básicos de una casa. Con estas dimensiones se insinúa la idea de restricción y cautiverio, que a través de la conducta corporal de las protagonistas se hace aún más visible. Esta situación espacial pone en conflicto el cuerpo y la psíquica de los personajes. Finalmente son ellas quienes deben adecuar su relación con la realidad que las envuelve, muchas veces perturbando sus emociones.